90° Día Internacional de la Cooperación. Sábado 7 de julio de 2012.

El reconocido cooperativista Eduardo Fontenla destaca la importancia del Día Internacional del Cooperativismo en un artículo enviado especialmente a la Fundación La Dulce. Un mensaje claro y esperanzador de que otra sociedad es posible.   “Las empresas cooperativas ayudan a construir un mundo mejor” Escribe el Lic. Eduardo H. Fontenla (*) El día INTERNACIONAL DE  LA COOPERACION

El reconocido cooperativista Eduardo Fontenla destaca la importancia del Día Internacional del Cooperativismo en un artículo enviado especialmente a la Fundación La Dulce. Un mensaje claro y esperanzador de que otra sociedad es posible.

 

“Las empresas cooperativas ayudan a construir un mundo mejor”

Escribe el Lic. Eduardo H. Fontenla (*)

El día INTERNACIONAL DE  LA COOPERACION es una oportunidad propicia para  realizar una justa revalorización del  accionar de las empresas cooperativas y para pensar sobre las soluciones que el movimiento cooperativo  debe y puede  aportar en la identificación de  nuevas salidas y respuestas a las necesidades concretas y actuales de sus asociados y de sus comunidades.

Esta conmemoración tiene una significación especial,  ya que se realiza en el marco del año internacional de las cooperativas, declarado por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), bajo el eslogan, que se mantiene para el 90° Día Internacional “Las empresas cooperativas ayudan a construir un mundo mejor” y cuyo objetivo es crear conciencia sobre su importancia, promover su expansión y establecer políticas públicas apropiadas para su formación, desarrollo e integración.

Porque las cooperativas han adquirido una gran relevancia en el ámbito empresarial, convirtiéndose en entidades socio-económicas de importancia y en favor de un desarrollo sostenible. Asimismo han demostrado ser una alternativa real ante los efectos negativos de las crisis, dado su compromiso con sus asociados y el anclaje local  que las caracteriza.

Al interno de cada cooperativa los cambios producidos exigen, por un  lado, pensar participadamente una renovación y reformulación de las estrategias y de los procesos de gestión y, por otro, una urgente vuelta a la esencia, valores y principios , es decir, una repaso integral de las lecciones de identidad e historia cooperativa. Es decir, combinar creativamente lo viejo y lo nuevo.

Como homenaje al  día internacional de la cooperación queremos compartir  una propuesta de “reflexión-acción-reflexión” que contribuya a la construcción de un futuro exitoso de la economía solidaria, donde se enmarca el cooperativismo.

Para ello, proponemos una mirada y un  análisis crítico sobre la visión, misión y  gestión de las cooperativas. Revisión, que dada su naturaleza participativa,  debe incluir e integrar a todos los estamentos  de las organizaciones, dirigentes, síndicos, asociadas y asociados con su grupo familiar, jóvenes, funcionarios, técnicos  y empleados y no ser la lectura aislada de algún dirigente, funcionario o técnico, que se considere un sabelotodo o que el grupo le asigne el rol de iluminado. Obviamente, que esta idea,  debe contar con el compromiso y  estímulo del estamento dirigencial, cuya función básica es interpretar el mundo presente e imaginar posibles mundos futuros, porque hoy se requieren nuevas propuestas  y soluciones ante los problemas del desarrollo y de búsqueda de un mejor vivir.

El análisis debe partir teniendo claro  lo que  se sueña, une  y se quiere como cooperativistas y como movimiento de la economía solidaria, para luego analizar las diferencias y lo que separa, atravesando barreras sectoriales y prejuicios arraigados. Es necesario pensar y actuar en red en la economía solidaria y no levantar paredes organizacionales y sectoriales que dividen, producen desajustes colectivos y  le quitan impacto. Es muy  importante  el método de trabajo a utilizar porque muchas veces, por intereses mezquinos nunca explicitados o concepciones personales, se ha trabajado desde las diferencias, malogrando las enormes fuerzas y sinergias propias del  sector cooperativo  y la de su vinculación con el sector de la economía solidaria  al que pertenece. Una  forma de recuperar la visión y aumentar la  competitividad empresaria sistémica de las  cooperativas, es trabajar en una primer etapa sobre los siguientes aspectos:

1) Generando la condiciones favorables para una conciencia sobre el cambio y la velocidad del mismo, a fin de identificar  en cada cooperativa o federación lo que debe ser cambiado, desde una clara cosmovisión y orientación doctrinaria. Para lo cual no es suficiente conocer la doctrina o recitar algún principio en un discurso, es necesario comprenderla y sentirla.

2)  Incrementando actitudes pro-activas que aumenten la capacidad propositiva de las organizaciones y la identificación de nuevos proyectos. Evitando las actitudes re-activas que aumentan los costos del cambio y frenan las innovaciones organizacionales y lo hacen ingrato. Debemos recordar que no existen en la conducción y gestión empresaria soluciones mágicas y voluntaristas.

 

3)   Aumentando la inversión en formación e investigación, ya que en una época de acelerados cambios y nuevas complejidades,  el conocimiento es clave e indispensable para la conducción y gestión de un desarrollo sostenible.Asimismo es necesario alcanzar una mayor  y mejor  vinculación y conexión de las empresas cooperativas con las universidades e institutos de investigación, para descubrir nuevos emprendimientos y el desarrollo de tecnologías apropiadas.

4) Creando fuerzas aliadas intersectoriales y de confraternidad política en el movimiento cooperativo. Como así también unión, cohesión y pactos de colaboración con los otros sectores de la economía solidaria y de las micro, pequeñas y medianas empresas.

5) Desarrollando equipos de trabajo, evitando la instalación de los liderazgos de héroes o individualistas del pasado. Estos últimos estilos de conducción,  muy comunes en las empresas cooperativas, han sido causa de las crisis de muchas organizaciones de 1er. y 2do. grado en Argentina. Cabe destacar que un compromiso vital para generar las condiciones que faciliten el cambio, es la cultura grupal, el liderazgo de equipos, el diálogo de saberes y construcción de consensos.

6)     Actuando e incidiendo sobre los actores que toman las decisiones políticas haciendo valer y reconocer la importante significación institucional y contribución al desarrollo que realizan las cooperativas. Especialmente en este año 2012, declarado por la ONU como año Internacional de las Cooperativas.

La estrategia de nuevas propuestas debe ser muy clara, contar con una fuerte orientación valorativa y ser explicitada, recordando que el poder o espacio  que se abandona desde la economía solidaria lo toma u ocupa otro actor y no queda vacío. Asimismo para lograr los objetivos fijados se  requiere utilizar,  tanto herramientas de planificación adecuadas, como contar con  una excelente capacidad de gerenciamiento, de gestión y de control. De esta forma será posible continuar brindando los mejores servicios posibles a los asociados, razón de ser de las cooperativas. Esto permitirá diferenciar el accionar y los servicios que brindan las cooperativas a fin de cada día mayor cantidad de personas opten por los productos y servicios cooperativos.

Estamos convencidos que una decisión política–institucional que promueva acciones de este tipo,  es una buena forma de conmemorar el 90º Día Internacional de la Cooperación y sumarnos constructivamente al desarrollo  sostenible y con inclusión de la Argentina

(*) Nació en Sancti Spíritu, Provincia de Santa Fe.Licenciado en Cooperativismo y Mutualismo y Licenciado en Ciencia Política y Gobierno.

 

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