Capacitación sobre Manejo Reflexivo.

Días pasados, personal de Seguros Rivadavia, estuvo en las instalaciones del Centro de Convenciones de La Dulce Cooperativa de Seguros, brindando una capacitación sobre Manejo Reflexivo. De la misma, participó el personal de la Cooperativa, de Fundación La Dulce y el equipo de Tasadores, por la tarde, alumnos de la Escuela Nº 42, asistieron a

Matías Cetolini, Leandro Principato, Juan Jose Niedfeld y Francisco Alonso Chávez.

Días pasados, personal de Seguros Rivadavia, estuvo en las instalaciones del Centro de Convenciones de La Dulce Cooperativa de Seguros, brindando una capacitación sobre Manejo Reflexivo.

De la misma, participó el personal de la Cooperativa, de Fundación La Dulce y el equipo de Tasadores, por la tarde, alumnos de la Escuela Nº 42, asistieron a una charla sobre el mismo tema.

Luego de la capacitación, el personal de la Cooperativa, pudo realizar tests de manejo y de coordinación, con herramientas especiales que Seguros Rivadavia posee para mejorar y concienciar sobre el manejo y la prevención de accidentes viales.

Dialogamos con Juan José Niedfeld, Gerente de Prevención de Siniestros y Seguridad Vial sobre la capacitación que realizó junto a Leandro Principato en nuestra localidad y sobre su apreciación de los participantes de la misma.

-Juan José Niedfeld, Gerente de Prevención de Siniestros y Seguridad Vial ¿Con que motivo los convocaron?
-La Dulce Cooperativa de Seguros, nos conocía, porque nosotros ya hemos actuado con personal de ellos en Pergamino, haciendo charlas de prevención y seguridad vial, y esta vez nos convocaron en La Dulce para hacerla con otro grupo de su personal y además aprovecharon la oportunidad del viaje y la posibilidad de dar una charla, para hacerla extensiva a los alumnos de la Escuela Nº 42, sobre el mismo tema de prevención.

-¿En qué consiste la charla?
-La charla se llama manejo reflexivo, que de alguna manera tiende a llevarnos a otro tipo de manejo que es el que todos conocemos, que es el manejo defensivo. Desde el punto de vista de Seguros Rivadavia, lo que tenemos que hacer para evitar este tipo de catástrofes que tenemos a nivel nacional, siendo los accidentes viales la primera causa de muerte, no es defendernos de los demás, sino reflexionar un poco sobre las propias actitudes.  Esto es lo que hemos tratado de dejarles al grupo que participó de la capacitación. Es decir, en circunstancias comunes de la vida cotidiana, uno actúa sin pensar, por costumbre, por haberlo visto, por venir haciéndolo hace muchos años sin que nos pase nada, pero esas cosas a veces pasan y es así como ocurren las catástrofes.

-¿Se pueden modificar esas actitudes?
-Si, se pueden modificar. De lo que estamos convencidos, desde Seguros Rivadavia y a lo que apuntamos, es que para modificar actitudes no hay que conocer sobre seguridad vial, sino que hay que sentir la inseguridad vial y esa diferencia es sustancial para poder cambiar una actitud. Por ejemplo, si le preguntáramos hoy a los alumnos de secundaria si saben  cuánto alcohol pueden tomar, dicen que si, si saben cuál es el límite de graduación que tienen las bebidas que toman, también dicen que sí, pero si les preguntas si ellos toman lo que tienen que tomar, dicen que no. Entonces, esto no es solo un tema de conocimiento, sino de actitud y para cambiar la actitud hay que reemplazar el conocimiento por conciencia.

-¿Cuál es la diferencia?
-Tener conocimientos es saber y tener conciencia es darse cuenta. La diferencia entre saber y darse cuenta, está en que para darme cuenta tengo que pensar. Para tomar conocimiento, no. Yo lo recibo y ya lo estoy incorporando, pero para darme cuenta tengo que pensar. Entonces desde Seguros Rivadavia, hace ya muchos años que tratamos de hacer las capacitaciones, dejando a la gente que piensen ellos sobre la problemática y la idea no es decirles que es lo que ellos tienen que hacer para evitarse tal o cual circunstancia, sino mostrarles las circunstancias y que cada uno defina de qué manera se cuida en esa circunstancia. Porque es muy razonable que siendo seres humanos, cada uno se cuide de distintas maneras. Cuando uno da una receta de cómo cuidarse, con mucha suerte coincidirá con el diez por ciento de los que lo escuchan, entonces la idea es esta, mostrarles un poco el riesgo y a partir de sentir ese riesgo que empiecen a cambiar de conducta.

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