Los bloqueos suelen persistir entre 3 y 5 días aunque, excepcionalmente, pueden durar semanas. En el caso de la República Argentina, estas situaciones son bastante frecuentes y dependiendo de dónde se producen, dan lugar a distintos tipos de tiempo y pueden provocar grandes sequías, períodos de temperaturas altas o bajas o lluvias persistentes.

En la época estival, suelen producirse sobre la zona central del país y el fenómeno meteorológico asociado en este caso son las “olas de calor”, ya que la escases de nubosidad producida por la alta presión, sumada al viento leve y a la radiación solar intensa, produce un período prolongado de elevadas temperaturas.

En el invierno, en cambio, los bloqueos típicos se originan al extremo sur del país, manteniendo ese sector con buenas condiciones de tiempo, desplazando las precipitaciones al norte de la Patagonia y produciendo (debido a la rotación antihoraria de los vientos alrededor de las altas presiones) vientos del sur o sudoeste en el mar argentino y zona central del país, teniendo como protagonista al frío.

Las bajas temperaturas en el país en este mes de mayo están favorecidas por un bloqueo situado hace varios días sobre el pasaje de Drake, que hace que el aire frío avance por el continente. Otro fenómeno meteorológico significativo producido son las abundantes lluvias sobre el sur de Cuyo y norte patagónico durante la semana pasada (y a partir de mañana miércoles nuevamente).