Décimas Dulceras

Versos de Mario Tejo para celebrar los 114 años de La Dulce

Hace unos días, llegó a mis manos «Al calor del fogón» un pequeño libro con coplas, zambas y décimas de Mario Tejo.
Tejo llegó a La Dulce como empleado del Banco Provincia y enseguida se auto definió como dulcense.
Hace hace muy poco tiempo nos dejó, pero quedan sus versos y su recuerdo.
Comparto con todos los lectores de este diario, estas «Décimas Dulceras»  donde Tejo nos describe y donde, de alguna manera, se despide de éste, su pueblo.

Hasta siempre Mario. Guitarrero de La Dulce.

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DECIMAS DULCERAS

En décimas mal escritas
voy hilvanando mi canto,
que a veces suele ser llanto
y a veces agua bendita,
mi alma, lo necesita
porque es parte de mi vida
es mi familia querida
mis amigos y mi tierra:
es lo que mi pecho encierra
y canto en coplas sentidas…!

Guitarrero, de la Dulce
por ahí, escuché decir,
pa´ mí que no soy de aquí
eso es duplicar mi halago
y confirmar que lo hago
sencillo pero sentido,
como estos versos nacidos
de adentro del corazón:
debían hacerse canción
para cantarle a estos pagos…!

Sin querer vine a parar
sin conocerla siquiera,
hallé abierta la tranquera
y atropellé sin llamar.
Mi canto con humildad
se entró mezclar entre todos
y así les cante a ni modo,
lo que en mi pecho bullía:
fui conociendo a esta tierra
que hoy ya siento, casi mía…!

Tranquila y simple había sido
la vida que aquí se pasa
al calorcito e´ las brasas
de algún fogón encendido,
siempre rodeado de amigos
entre asados y guitarras,
noches enteras de farras
transcurren sin apurar:
si al fin de cuentas, igual
la muerte me ha de pialar…!

Qué puede importarle al mundo
si se calla mi guitarra…?
Mi corazón se desgarra,
tan solo de irlo pensando
mis cuerdas penan, cantando
con sentimiento bendito
mi canto yace marchito
a un costao´ de la encordada:
puede parecerles nada,
pero para mí, es infinito…!

Cuando una cuerda se corta
se va despacito al cielo,
y a mí me queda el consuelo
de haberlas hecho vibrar
gracias les doy por sonar
acompañando mis sueños
yo que fui un poco su dueño
siento que llegó el momento
son parte de mi instrumento
y hoy las quiero homenajear…!

Hay cosas que he de cantar
si ustedes me lo permiten
aunque sé que se repiten
en boca de los cantores
y no porque sean mejores,
pero si los más sentidos,
por eso me he permitido
sobre el tema improvisar:
Mis décimas es de soltar
aunque peque de atrevido…!

Debe encontrar la medida
el hombre qué es advertido
porque el vino bien bebido
es regocijo del alma:
al pecho herido lo calma,
le da calor y coraje
y en cuanto escucha un cordaje
no hay sentir que no se salga
pa´ un corazón que galope
no hay carcelero que valga…!

También les he de cantar
una estrofa a los bomberos,
y aquí hay un punto certero
que yo quiero destacar:
la vida se han de jugar
si es necesario por otro,
no les hace falta potro
ni guitarra, ni facón:
él es gaucho entre nosotros
cuando cuadra la ocasión…!

Cómo olvidar en mi canto
a Eduardo Marcos: Campeón!
de La Dulce, embajador
de simpatía y amistad.
Siempre en carrera ha de estar
y lo que es más importante!
La Dulce siempre adelante
junto a su nombre estará
y esta es la mejor carrera
que el pueblo puede ganar…!

Desde chico, con mi hermano
jugaba a ser payador
y hoy que yo tengo el honor
de estar entre tanta gente
siento, como de repente
ciñe un nudo mi garganta,
mi recuerdo se agiganta
y me transporta otra vez
si parece que fue ayer
que era semilla esa planta…!

Por eso quiero dejar
estas décimas dulceras
mi corazón sólo espera
haberles hecho escuchar
en este humilde cantar
todo lo que adentro siento…
y si es que hubo algún lamento
se me ha escapado al pensar…
que de aquí me he de marchar
cuando me llegue el momento…!

En décimas mal escritas
entreveré mi sentir
tanto les quise decir
que al final me faltó letra.
Quise que La Dulce sepa
aunque no soy buen cantor
que al calor de su fogón
y su honrado por su amistad
sentí ganas de cantar
y le abrí mi corazón…!

En décimas es sentido
necesidad de cantar .
Una vez pa´ agasajar
a esos amigos queridos
que tres años han cumplido
de paciencia y de yugarla
y hoy coronan la guirnalda
de ese esfuerzo sincero :
Porque han sido los primeros,
quise nombrar La Esmeralda…!

Tantos nombres se han sumado
en dos años al fogón
que no alcanza una canción
para nombrarlos a todos
pero sepan que a mi modo
con la intención los nombré
en cada fogón que canté
desde El Cruce al resto entero
desde Oscar que fue el primero
y a ninguno olvidaré…!

Voy arrancando a mi canto
lo más hondo del sentir
para poderles decir
con todo mi sentimiento
qué tal vez llegó el momento
en que tenga que partir
muy lejos me habré de ir
por la huella que he venido
tal vez me cubra el olvido
pero mi alma queda aquí…!

Tengo una pena en el alma
y no sé porqué será ,
a mi copa en soledad
la acompaña por las tardes,
y en mi guitarra hace alardes
cuando me da por pensar
qué pagos me han de esperar
y por qué huella me iré…
A veces pena mi pena
queriéndose aquerenciar…!

Por eso, dejo a mi paso
la huella en canto grabado
pa´ ustedes, haber cantado
juro que ha sido un gustazo
será porque son gauchazos
que están en mi diapasón,
muy dentro del corazón
he de llevarlos conmigo
pa´ mí La Dulce habrá sido
tal vez, mi mejor canción…!

No faltará la ocasión
en algún pago lejano
de encontrar algún paisano
que galope allí de paso
si es de La Dulce, amigazo
seguro no ha de fallarme
habrá de ir a visitarme
y ha de esperarlo mi canto
y si estoy en camposanto
habrá de resucitarme…!

Mi canto empieza a callarse
porque me espera el camino
yo no guío mi destino
más por lejos que yo ande
donde quiera que me manden
siempre presente han de estar,
por las noches mi cantar
sabrá de melancolías:
juro volver algún día,
bajo este cielo a cantar…!

MARIO TEJO.

One Response to Décimas Dulceras

  1. Agradezco, el recuerdo de mi querido viejo por La Dulce. Vivimos maravillosos momentos.
    Nahuel Tejo

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