María Eugenia Duffard, presente en el cincuentenario del Jardín.

La periodista dulcense que trabaja con Jorge Lanata en radio Mitre y en PPT y en Telenoche, estuvo festejando los cincuenta años del Jardín N° 904.

maru duffard

Maru Duffard junto a su mamá Susana Cuccioli y su madrina Beatriz Barbieri.

Muchos dulcenses llegaron desde otras localidades el domingo a festejar los cincuenta años del Jardín. Ex docentes, ex alumnos y público en general se reunió a celebrar. Entre los presentes estuvo María Eugenia Duffard, ex alumna de lujo de la institución, con quien aprovechamos a dialogar sobre su vida, su trabajo  y su visión del país.

-Cómo estás viviendo este día de festejos en el cumpleaños del Jardín?
-Muy contenta de estar este día acompañando a mi mamá, que trabajó tantos años en el jardín. Quería acompañarla y estar con ella, vine también cuando cumplió años la Escuela N° 42. Es lindo compartir estos momentos.

¿Te reencontraste con compañeros y maestras?
-A mis compañeros los sigo viendo, porque son mis amigos de La Dulce de siempre. Me encontré con Marita Sampayo, mi maestra de salita de 3 años, que hacía mucho no veía.

-Te vemos avanzando continuamente en tu trabajo, ¿cómo estas viviendo esta etapa?
-Estoy muy contenta, ahora estoy en Telenoche. Me incorporé al equipo de Telenoche cuando terminó Periodismo Pata Todos el año pasado, también estoy en la radio con Lanata y pensamos que en junio o julio vuelve PPT, así que estaré ahí también.

A seguir investigando…
Si, eso lo hemos seguido haciendo, el equipo que estaba en PPT es el que está ahora en Telenoche. Pero PPT requiere otro formato, otro estilo de trabajo y está bueno, estoy contenta.

-¿Tenes algún otro proyecto laboral?
-En principio no, con esto estoy bien. Estuve en Clarín hasta este mes y me fui porque es como que no te da el tiempo para compaginar todo. La radio lleva mucho tiempo, es toda la mañana y la televisión también. Por ahí lo que uno ve son dos o tres minutos al aire, pero son muchas horas de producción. Tengo 32 años, tengo que vivir un rato…

-Te iba a preguntar, ¿cuándo dormís?
-No duermo mucho, pero soy consciente que tengo que aprovechar estas oportunidades de trabajo. No tengo hijos y puedo hacerlo full time. Si sale algún proyecto nuevo, también lo veré, me gustan los desafíos nuevos, ahora estoy en esto, el día de mañana se verá.

-Te escuchamos muy fresca en la radio y cada vez más segura, ¿como vivís ese proceso?
-Bueno, nunca pensé que iba a trabajar ni en radio ni en televisión. Yo amo la gráfica, pero el avance de la tecnología va cambiando los medios. Llegué a radio Mitre de la mano de Jorge Lanata por una licencia de una semana de Luciana Geuna. Al año siguiente Luciana se fue a la FM y me llamaron a mí para hacer la columna de política, turnándonos con Nicolas Wiñasky. Es un sistema que está bueno porque la televisión requiere de más viajes y de esta manera tenemos más flexibilidad con los tiempos. Me gusta mucho la radio, me divierte, es un esquema que te permite dar mas opinión o más reflexión de las cosas que vos ves, sin descuidar la información que es la prioridad.

-¿Cómo es trabajar con Lanata?
-La mesa de Lanata sin Filtro es horizontal, abierta. Podemos charlar, me parece que el que escucha el programa ve las diferencias al aire. No pensamos todos igual y eso, lejos de ser un problema enriquece el programa. A mí me gusta trabajar en lugares así, donde no necesariamente tenemos que pensar todos igual.

-¿Como estas viendo la situación del país?
-Me preocupa. Creo que es importante que el gobierno logre encontrar una manera de comunicar las decisiones políticas, que no siempre son agradables. Hay decisiones que se están tomando ahora, que son por cosas que se hicieron mal antes, pero eso no justifica lo que se hace ahora. Digo esto: cuando uno quiere ser presidente de la Argentina tiene que saber que va a presidir la Argentina, esto no es Suiza. Entonces, la Argentina tiene dificultades económicas que saber administrarlas, hay que saber comunicarlas y lograr sobre todo mantener la calma o la paz social si se quiere. Yo veo que hay gente enojada, tanto de un lado como del otro y creo que eso no está bueno. Creo que la diferencia siempre enriquece, el problema es que estamos un poco intolerantes y nos cuesta escucharnos.

-Al gobierno se le reclama que no sabe comunicar, ¿vos coincidís con ese aspecto?
-Si, un poco. A veces pienso, yo he tenido oportunidad de hablar con muchos ministros, tambien con el presidente y ellos tienen una posición qie a nosotros nos cuesta entender, es una cuestion cultural. Yo no se si va a funcionar o no. Con esto no lo estoy justificando, lo que digo es que lo que ellos dicen es que apuestan a un cambio cultural. Quieren que la comunicación sea otra cosa, que los argentinos tenemos una cuestión muy como un Boca-River y que ellos apuestan a otro tipo de comunicación, donde lo importante es lo que piensa la gente y no lo que los medios dicen que la gente piensa, que a veces es distinto.

-Es tal vez difícil de entender la propuesta, veremos si pueden lograr el objetivo…
-Si, yo creo que lo primordial obviamente es la economía. Lograr controlar la inflación, lograr que las inversiones lleguen y después ver cómo se administran. También es cierto que para eso el pueblo tiene que tener esperanzas, ganas y la idea de que las cosas pueden ir bien, que va haber trabajo y que uno va a tener para darle de comer a sus hijos. Por ahí acá en La Dulce la realidad es otra. La extrema pobreza no ve, gracias a Dios, pero hay otros pueblos en el interior del país, chiquitos como éste, que la gente no tiene ni luz ni agua. El año pasado con PPT estuve en un montón de pueblos en el norte, en el Impenetrable Chaqueño y ahí la verdad que se viven como si eso no fuera parte de la Argentina, lo que hay que entender es que es un país muy grande y muy diverso, mucha gente con mucho dinero y mucha gente con muy poco.

-Hablando de gente con mucho dinero, ¿cómo fue tu estadía en el sur con el tema de los allanamientos a Lázaro Baez?, ¿cómo lo viviste?
-Fue un trabajo super intenso. Para mi fue buenísimo porque yo nunca había hecho una cobertura para un noticiero saliendo al aire todo el tiempo y tratar de tener en cada salida información propia para contar y chequear al mismo tiempo, o sea que desde lo profesional fue un trabajo muy bueno y desde lo personal yo había ido muchas veces a Río Gallegos y a Calafate por PPT a hacer notas de otro estilo, no coberturas. Lo que me pasó esta vez es que encontré a la gente muy convulsionada y también muy indignada. El común de la gente es gente de trabajo, que tiene un sueldo, con las cosas más caras por ser del interior y ver una persona que todos conocen y que dejó en la calle un montón de gente, porque Lázaro Báez cerró Austral Construcciones y dejo en la calle a más de 1000 trabajadores, a los que no les pagó indemnizaciones ni aportes. Ahora un juez civil acaba de ordenar el remate de bienes por más de 11 millones de pesos porque no pagaba la ART. Entonces, un tipo que no pagaba la ART a sus empleados y que los despidió sin indemnización y que al mismo tiempo tiene mansiones que no usa, es obsceno, es violento. Es un mensaje violento que enoja. Es una enorme desigualdad que cuesta entender. ¿Para qué quiere un tipo más de doscientas propiedades que ni siquiera las puede usar? Uno ve lo que se mostró en los allanamientos, pero la desigualdad es ver gente con un montón de dinero, habrá dinero bien habido y mal habido, pero por otro lado gente que no tiene nada. Y lo que si estaría bueno es que haya un mensaje que se construya desde el poder, en este caso desde el gobierno, que el trabajo y el esfuerzo tiene un premio. Ese es un valor que estaría bueno recuperar. Que el trabajo y el esfuerzo sirven para estar mejor, para tener dignidad, para progresar, soñar, que los sueños uno los puede concretar con esfuerzo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.