Si hubo alguien que disfrutó de los cumpleaños de La Dulce, que participó activamente para que nuestras tradiciones y nuestra identidad no se perdieran, fue Iris. Y en estos días de recordar el centenario de La Dulce y en el día del aniversario N° 112 de nuestro pueblo, en plena cuarentena, el nombre de Iris resuena a cada rato, en cada recuerdo, en las fotos, en la música. Siempre está presente.

Se me ocurrió pedirle a su hija Andrea, algo escrito por Iris para armar algún vídeo, o algo. No tenía muy en claro qué, pero Iris tenía que estar en este cumpleaños de La Dulce. Por supuesto que estuvo de acuerdo y lo que recibí fue más de lo que pedí. En este vídeo está la voz de Iris describiéndonos, están los lugares que amó, las vestimentas que eligió, diseño y ella misma cosió para su Quebracho, está la gente que la acompañó a lo largo de su vida y a quienes sabiamente guió. Hay tradiciones, literatura, festejos, educación, cultura. Están los lugares, la gente y las instituciones de nuestro pueblo. Está todo lo que ella amaba.

Junto con el vídeo recibí estas palabras:

«Gracias a la propuesta de Juli, para ver si teníamos alguna poesía de mi abuela, encontramos varios escritos para su pueblo, en el que nació en 1940 y en el que vivió toda su vida. Pero también teniendo a mano una entrevista que le hicieron de una radio de Mar del Plata en la que cuenta la historia y muchos datos de La Dulce, quise usar algunos pequeños fragmentos que describen cómo somos como pueblo en pocas palabras.
Con algunas fotos de momentos vividos, faltan miles que me gustaría agregar pero es un intento de honrar a La Dulce cómo mi abuela lo hubiera hecho».

Olivia