Charla de los integrantes del Grupo Ecotoxicología y Contaminación Ambiental en la Escuela Nº42.
ALUMNOS Y PUBLICO EN GENERAL PARTICIPARON DE LA CHARLA. EL GRUPO PERTENECE A LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE MAR DEL PLATE, DEPENDIENTE DEL CONICET. Karina Miglioranza, Mariana González y María Florencia Silva Barni pertenecen al laboratorio de toxicología y Daniel Martínez al laboratorio de Hidrogeología, los cuatro investigadores trabajan en conjunto en el proyecto de Ecotoxicologia
ALUMNOS Y PUBLICO EN GENERAL
PARTICIPARON DE LA CHARLA.
EL GRUPO PERTENECE A LA UNIVERSIDAD
NACIONAL DE MAR DEL PLATE, DEPENDIENTE
DEL CONICET.
Karina Miglioranza, Mariana González y María Florencia
Silva Barni pertenecen al laboratorio de toxicología y
Daniel Martínez al laboratorio de Hidrogeología, los cuatro
investigadores trabajan en conjunto en el proyecto de
Ecotoxicologia y Contaminación Ambiental, dependiente
del CONICET.
Los alumnos desarrollaron gran cantidad de preguntas,
todas referidas a la problemática de la contaminación
ambiental, la contaminación de los ríos y lagunas y de las
napas. También estaban presentes Alberto Fructuoso,
productor general del programa Día de Pesca, que se emite
en el canal Sembrando Satelital, junto a particulares
aficionados a la pesca, preocupados por la baja en la
cantidad de peces en el Río Quequén.
Los investigadores desarrollaron diversas hipótesis sobre
el origen de la falta de peces en el rio, una de las cuales es la
contaminación producida por compuestos organoclorados,
que surgen de haber utilizad oeste compuesto en pesticidas.
Este tipo de tóxicos, hace aproximadamente 40 años que se
ha prohibido y se dejó de usar, pero los efectos de los mismos,
se siguen encontrando en estas zonas. Si bien todavía se puede
considerar que las cantidades encontradas en los sedimentos
del rio y de la laguna, es aceptable, es de suma importancia
que se tomen mediadas urgentes para no seguir contaminándolos.
En años pasados, las riveras de los ríos poseían hasta 15 metros
de pastizales naturales, que oficiaban de barrera natural para
que los pesticidas no llegaran al cauce del mismo. Con la
implementación de la siembra directa, la no rotación de los
cultivos y las canalizaciones que se realizan en los campos
hacen que los tóxicos lleguen de inmediato al cauce del rio,
produciendo daños irreparables.
La toma de conciencia y la responsabilidad es la única
manera de corregir estos malos hábitos, que están dañando
considerablemente la salud del planeta. Reciclar materiales,
usar pesticidas sólo cuando es necesario y no en forma
preventiva, rotar los cultivos, evitar la quema de plásticos
y gomas, ya que su combustión es altamente tóxica y
produce lluvia ácida, son algunas de las medidas que se
pueden tomar para comenzar a proteger el planeta.
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